Sonic Migatte No Gokui

Ojos plateados, aura azul, pelo oscuro levemente erizado y un ki «monstruosamente tranquilo»... Así se veía Sonic  usando el Migatte no Gokui. A diferencia de lo que muchos esperaban, Sonic no sufrió una transformación en base a su naturaleza de las Esmeraldas del Caos, sino que adquirió una nueva forma mediante el dominio inconsciente de una técnica. Tras agotar todo su ki —usando su máximo potencial—, cae dentro de la Genkidama, y al entrar en contacto con esta, colisionan. «Dentro de la explosión, al chocar con el poder generado por la Genkidama rechazada, él mismo cortó el lazo y sobrepasó ese poder». Sonic rompió sus límites y adquirió una forma capaz de entender y dominar el «ultra instinto».

La Doctrina Egoísta:

En esencia, el Migatte no Gokui es una técnica de los dioses difícil de dominar que ni siquiera Mephalis ha podido perfeccionar. Durante los sucesos previos a la Resurrección de nazo, Wiss, maestro de «La doctrina egoísta»—también traducida como 'dominio del automovimiento'—, enseña a sus dos pupilos que para ser un buen luchador no tienes que pensar a la hora de combatir. Al dominar esta técnica, el cuerpo se mueve de manera voluntaria e instintiva, contrarrestando ataques de manera rápida, inconsciente y precisa. «La doctrina egoísta» es una técnica rara incluso entre los dioses, imposible de asimilar por un mortal... hasta Sonic. 

No obstante, Sonic no solo hace uso de esta técnica, sino que, además, la utiliza en lo que sería el inicio de un nuevo estado y posible futura transformación (es por esto que Wiss cuestiona la naturaleza del aura desconocida que rodea a Sonic, la cual no es propia de un usuario del Migatte). 

El Ultra Instinct usado (o creado) por Sonic es un estado que podríamos comparar con el Kaio-Ken —técnica de origen divino, también— y que combina y/o asimila las enseñanzas de Wiss. Probablemente, Sonic será capaz de controlar el excedente de poder del SSJ Blue (representada a través del aura que lo rodeaba), y, de esta manera, perfeccionará su propio Migatte, aunque, ¿será capaz de derrotar a Mephalis?